La escuadra ‘cafetera’ fue más y si de merecimientos se trata debió llevarse la victoria porque contó con más posibilidades frente al arquero Allison, además minimizó el juego de los ‘pentacampeones’ mundiales anulando a los hombres más complicados.
El choque, uno de los más esperados de la primera fase, tuvo la intensidad y emoción prometidas pero poca brillantez de las figuras sobre el césped, especialmente de un apagado Vinicius, quien no estará en el partido ante los uruguayos al recibir una tarjeta amarilla, a los 7 minutos, cuando dejó el brazo en alto a James Rodríguez.
El partido se comenzó a inclinar a favor de los brasileños de manera inesperada, pues consiguieron ponerse adelante en el marcador sin haber hecho los méritos. A los 12 minutos, el extremo del Barcelona Raphinha anotó un soberbio gol de tiro libre que dejó sin reacción al arquero Camilo Vargas. Este tanto llegó justo poco después de que James Rodríguez, omnipresente en el Levi’s Stadium de Santa Clara, se topó con el travesaño en otra falta cobrada desde fuera del área.
A pesar del gol de los ‘auriverde’, los colombianos siguieron con su juego ofensivo en busca de la paridad. El conjunto ‘norteño’ fue paciente y se mantuvo hilvanando jugadas con un inspirado James Rodríguez. El premio llegó a los 45+3 cuando Jhon Córdoba habilitó a Daniel Muñoz para que anote la paridad ante la salida de Allison. La intensidad del juego bajó en la segunda mitad pero ambos equipos tuvieron opciones de inclinar el combate a su favor.
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Cabeza en alto
La selección de Costa Rica no pudo obrar el milagro y pasar a la siguiente fase, pero se despidió del torneo con la cabeza muy en alto, tras ganar por 2-1 a Paraguay en Austin y regalarse, al menos, unos momentos de esperanza en el que el imposible parecía posible. Los goles de cabeza de Francisco Calvo y del joven de 19 años Josimar Alcócer en los primeros siete minutos hicieron soñar momentáneamente a Costa Rica, que para avanzar necesitaba ganar, la derrota de Brasil, y también debía recuperar una diferencia de goles de seis tantos.
No pudo el equipo del técnico argentino Gustavo Alfaro. El gol de Paraguay, obra de Ramón Sosa, acabó con las esperanzas de clasificación, pero no manchó el gran trabajo de los ticos.
Paraguay se despidió de la Copa América con tres derrotas. La afición de la Albirroja intentará consolarse con la participación de su selección en los Juegos de París.